Basílica de San Juan de Letrán

Basílica de San Juan de Letrán

Edificada bajo las órdenes del Constantino el Grande durante el siglo IV, la Basílica de San Juan de Letrán fue la primera iglesia que se construyó en Roma.

Erigida en el siglo IV en honor a San Juan Bautista y al evangelista San Juan, la Basílica de San Juan de Letrán (Basílica di San Giovanni in Laterano) es la más importante de las cuatro basílicas mayores, además de ser la Catedral de Roma.

La basílica en el pasado

A comienzos del siglo IV el emperador Constantino despojó a la familia Laterani de sus tierras con el fin de construir sobre ellas la primera basílica romana.

A pesar de que con el paso de los años la iglesia ha sufrido las consecuencias de un terremoto y varios incendios, se ha visto expuesta a diversas reconstrucciones, por lo que aún conserva su forma primitiva, además de un bello claustro del siglo XIII y un antiguo baptisterio que se encuentra profundamente restaurado.

La Basílica de San Juan de Letrán ha tenido un importante papel en la historia, ya que hasta 1870 todos los Pontífices fueron investidos en ella. A día de hoy, la iglesia no ha perdido la importancia que la caracterizaba en el pasado ya que, el Papa, como obispo de Roma, continúa celebrando en su interior los oficios de Jueves Santo.

Detalles a tener en cuenta

El pórtico de dos pisos que se encuentra en la fachada principal de la basílica data del siglo XVIII, y constituye el lugar desde el que el Papa da su bendición cada Jueves Santo. En la parte superior de la fachada, imponentes estatuas de Cristo y los santos esculpidas durante el siglo XVIII dan la bienvenida a los fieles.

Las puertas centrales de bronce son las originales que se utilizaban en la Curia romana, situada en los Foros Imperiales.

La basílica presenta un interior grandioso y profusamente decorado, desde los techos hasta los suelos decorados con mosaicos sobre los que se erigen imponentes columnas y colosales estatuas.

Enfrente de la basílica se encuentra la Escalera Santa, por la que Jesucristo subió para ser juzgado en Viernes Santo. Fue llevada desde el palacio de Poncio Pilato en el año 326.

Entre las mejores de la ciudad

Además de ser la Catedral de Roma, la Basílica de San Juan de Letrán está entre las iglesias más bonitas de la ciudad. De todos modos, a pesar de tratarse de una de las mayores iglesias, no resulta tan sorprendente como Santa María de la Concepción o la San Clemente.

Horario

Todos los días de 7:00 a 18:30 horas.

Precio

Entrada gratuita.

Transporte

Metro: San Giovanni, línea A.
Autobús: líneas 16, 81, 85, 87, 186, 650, 810 y 850.