Cripta Balbi

La Cripta Balbi muestra el pasado de Roma mediante las excavaciones realizadas en sus yacimientos. Es una de las cuatro sedes del Museo Nacional Romano.

Los orígenes de la cripta

Originalmente la Cripta Balbi estaba compuesta por un teatro, un bloque de cuatro pisos y un patio. Construido entre el año 19 y 13 a.C. bajo las órdenes de Lucius Cornelius Balbus, el teatro poseía una cripta que era el lugar en el que la gente se refrescaba y tomaba algo durante los descansos de las representaciones.

Con el paso del tiempo, el teatro quedó en el olvido y fue sepultado por otras construcciones a lo largo de las distintas épocas. En 1981 comenzaron las excavaciones y, tras veinte años de restauración, fueron añadidas al Museo Nacional Romano.

Las exposiciones

En la planta superior se exponen objetos realizados entre la Antigüedad y la Edad Media, mostrando el modo de vida de los ciudadanos romanos entre los siglos V y X.

En la planta baja se sitúan las excavaciones en el contexto de la historia de la zona, mientras se muestran los restos de las excavaciones de la Cripta Balbi y otros yacimientos romanos.

El sótano es la parte más interesante del museo, ya que allí se encuentran las excavaciones realizadas junto al Teatro Balbus, que se pueden ver mientras se recorren los húmedos y oscuros pasadizos.

Cuatro por el precio de uno

Aunque las excavaciones de la Cripta Balbi no son tan interesantes como las de la Basílica de San Clemente u otros lugares, la entrada de ésta está incluida con la del resto de las sedes del Museo Nacional Romano, (Palazzo Massimo alle Terme, Termas de Diocleciano y Palacio Altemps) por lo que si tenéis tiempo suficiente después de visitar los lugares más interesantes de Roma, podéis hacerle una pequeña visita a la cripta.

Horario

Cerrado temporalmente

Transporte

Autobús: líneas H, 30, 40, 46, 62, 63, 64, 70, 87, 119, 130, 186, 190, 271, 492, 571, 630, 780, 810 y 916.